El Bienhablao

Repertorio de vocablos (La Manchuela)

Prólogo - Joaquín Reyes

Un día me llamó por teléfono Ángel Mora Rodenas, el autor de este diccionario manchego, y yo le dije que en ese momento no podía hablar con él, era mentira, poder sí podía, pero es que quería dar una morcholá. Días más tarde volvió, a llamar y después ha seguido llamando periódicamente. El motivo no era otro que pedirme que escribiera un prólogo para su libro. Finalmente yo accedí gustoso, por esa parte bien, pero he tardado mas de un año y medio en escribirlo, por esa parte mal. ¡Qué cachaza la mía!

Normalmente, y permitidme que hable un poco de mí, padezco, lo que los anglosajones llaman, el mal del impostor esto tiene que ver con la permanente sensación de estar en los lugares equivocados o de que se me pida algo que no pueda dar. Es culpa mía, despierto unas expectativas altísimas. Pero este no es el caso, porque si alguien puede escribir un prólogo para un diccionario manchego, ese soy yo. También podría hacerlo José Luis Cuerda o Pedro Piqueras, o incluso Pedro Almodóvar, pero el autor no tiene contacto con ninguno de ellos. Continuo. Es por todo el mundo bien sabido que en mi labor de cómico televisivo, yo y también mis compinches, nos hemos convertido en embajadores de La Mancha a base de utilizar nuestras palabrejas. Gambitero, churretoso, farfollas, pijo entre otras son usadas por nosotros sin mesura, ni asomo de sonrojo ninguno. Y parece ser un hecho, que estos términos y el acento con el que los decimos cautivan a la muchachada y a los padres de la muchachada. Y parece ser un hecho también que los manchegos estamos de moda, o al menos el humor manchego, que es algo que todavía no se sabe lo que es, pero que se está investigando.

Puede ser que todo esto, o quizás algo más profundo, haya impulsado a Ángel Mora Rodenas, que es manchego sin duda ninguna, yo diría que manchegazo, a recopilar, ordenar y definir más de 2.000 términos manchegos, configurando así un DICCIONARIO MANCHEGO (permitidme que en esta ocasión lo ponga en mayúsculas), con la intención de reproducirlo, encuadernarlo y venderlo. Y yo me pregunto ¿Hacía falta todo este esfuerzo? No lo sé, pero que es una cosa muy bonica lo de hacer un Diccionario Manchego, eso lo saben hasta en Lima. A mí, personalmente, me lo parece y me gustaría tener delante a Ángel para soltarle dos besos de abuela, pero como desgraciadamente no es así me conformo con escribirle este prólogo.

Joaquín Reyes
(Ilustrador, actor, guionista y director de Muchacha Nui)